¿Bajar los precios?

Pasamos el fin de semana con unas amistades de la capital, que se dignaron visitar las provincias, aprovechando el buen tiempo que parece está llamando a la puerta. Buena sobremesa la que disfruté escuchando a dos emprendedores contar cómo se parten el cobre en el día a día de la economía. Sólo me permití discrepar cuando explicaba Sergio una de sus estrategias para luchar en el mercado, que consistía en bajar drásticamente los precios de algunos de sus productos o servicios, pretendiendo desconcertar a la competencia.

No dudo que genere desgobierno comercial y que, indudablemente, hasta puede que el negocio registre incremento de facturación total, por no hablar de lo contento que se van a poner los clientes. Pero hay que tener sumo cuidado con el enfoque comercial, ya que el pan de hoy se puede convertir en hambre mañana. No estoy en contra de reducir los PVPs, todo lo contrario, pero siempre de una forma meditada, ajustando los valores de los escandallos a las realidades económicas y sociales. Lo mejor es combinar esta técnica con otras como puede ser la detección de aquello que aporta más valor al usuario de mis productos o servicios, generando un plus o diferencial de excelencia y calidad a precios razonables. En esta semana de transición, deseo que cierres abril lo mejor que puedas y entres con buen pié en mayo (fuente de la imagen: sxc.hu).