Según la Wikipedia, el comercio justo es una forma
alternativa de comercio que proyecta una relación comercial voluntaria y justa
entre productores y consumidores. Algunos de los principios que defiende el
comercio justo son: los productores forman parte de cooperativas u
organizaciones voluntarias y funcionan democráticamente; eliminación de los
subsidios y ayudas asistenciales; rechazo a la explotación infantil; igualdad
entre hombres y mujeres; el precio que se paga a los productores permite
condiciones de vida dignas; se valora la calidad y la producción sustentable; se
busca la manera de evitar intermediarios entre productores y consumidores; se
informa a los consumidores acerca del origen del producto, ...
Por motivos profesionales, recientemente he tenido la
oportunidad de conocer de primera mano los esfuerzos de la Asociación Española de Criadores de la Cabra Malagueña para la comercialización de los productos de
sus miembros. A través de Adrian y Alejandro, con la coordinación de Gracia, estamos
colaborando con su equipo comercial en materializar un acceso distinto al mercado, vía disminución
de la intervención de intermediarios, lo que permitirá ofrecer un precio justo,
tanto a los productores como al consumidor final.
Me siento plenamente identificado con los objetivos de esta organización: ordenación de
la oferta, reducción de los costes de producción y mejora de la calidad
de los productos. Pretenden poner en marcha un modelo de empresa cuyo sistema comercial
se encuentre basado en el diálogo, la transparencia y el respeto entre el
productor y el consumidor, apoyando el desarrollo sostenible en el medio rural.
Ayer, les ofrecí a un grupo de amigos la degustación de pierna de chivo, que estaba de escándalo. Ya en el año
2010, en el post “Cabra en vino”, te dejé una receta. Si quieres acceder a los
distintos recetarios, clickea AQUÍ (Fuente de la imagen: Página Web).