Por supuesto, no hay que olvidar la vía a través de la cual se transmite el mensaje del emisor al receptor, “o sea se”, el canal, y ese cúmulo compacto de circunstancias que rodean o influyen de alguna manera el desarrollo del acto comunicativo y que conocemos como “contexto", que no sólo se refiere a elementos físicos, sino también psicológicos o emocionales. Finalmente, en el noventa y nueve por ciento de las comunicaciones que se precien, es fundamental la repuesta del receptor al mensaje, que, a su vez, envía otro mensaje al emisor retroalimentando así –iniciando de nuevo- el proceso comunicativo, lo que comúnmente se conoce como retroalimentación o feedback. Se fue con el ceño fruncido, apareciendo al rato con el dibujo que te dejo a continuación y un trozo en el encabezado del post y en el que me he tomado la libertad de insertar los elementos de la comunicación.